PASIÓN Y MÚSICA

 

El pasado viernes 28 de septiembre tuvo lugar la inauguración y bendición del local de ensayo de la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora del Calvario de Villanueva de la Serena en las antiguas escuelas de Santa Ana. A este acto acudieron la Junta de Gobierno de dicha Cofradía, junto con miembros de las juntas de gobierno del resto de Cofradías villanovenses, así como el párroco de Ntra. Sra. de la Asución y capellán de la Cofradía, D. Nicomedes Silos Montero, que bendijo el local, y el alcalde de la ciudad, D. Miguel Ángel Gallardo Miranda, que procedió a la inauguración junto con la Hermanda Mayor, Dña. Cristina Díaz Rodríguez.

 

Fue un sencillo pero emotivo acto donde se quiso dar el pistoletazo de salida a un nuevo curso para esta agrupación, que ha puesto todo su ilusión en llenar de contenido y vida a este espacio cedido por el Ayuntamiento de Villanueva de la Serena, en el cual no sólo ensayarán y aprenderán las marchas procesionales que interpretan, si no que se ha apostado porque este local sea un espacio abierto para organizar master class, tertulias, actividades formativas y culturales, y en definitiva un lugar para crecer en el espíritu cofrade en nuestra ciudad.

 

La Banda comenzó su andadura en el año 1.991 dentro del seno de la Cofradía, y desde entonces ha experimentado una notable evolución, sobre todo a partir del año 2.005 en el que se inicia un nuevo proyecto musical bajo la dirección de Alonso Carmona e Isidro Parejo. En la actualidad cuenta con aproximadamente unos cincuenta componentes de entre 9 y 50 años que trabajan durante todo el año para conseguir llenar de música la Pasión villanovense.

 

Desde la Cofradía de Nuestra Señora la Virgen de los Dolores queremos agradecer a la Banda de Cornetas y Tambores que el pasado Viernes de Dolores se sumaran a la Banda Municpal de Herrera del Duque para conformar la primera banda de palio que acompaña un desfile procesional en nuestra ciudad, haciendo que nuestra titular procesionara por las calles de Villanueva con un acompañamiento musical digno y realmente bello.

 

 Esperamos que el estreno de las nuevas instalaciones de la Banda sirva como punto de partida para un mejor trabajo, una mayor dedicación y un auténtico vivero cofrade en nuestra ciudad.

FESTIVIDAD DE LA VIRGEN DE LOS DOLORES

   La Cofradía de Nuestra Señora la Virgen de los Dolores no sólo celebra cultos en hornor de su imagen titular durante la Cuaresma y la Semana Santa, si no que también festeja la memoría de la Virgen de los Dolores el día 15 de Septiembre, como así refrejan sus Estatutos, aprobados en Abril de 1.991.

 

   Desde los principios del Cristianismo la Iglesia, al rememorar la Pasión de Jesús, ha unido esta memoria al sufremiento y dolor de su Madre. El Evangelio de Juan nos testimonia que María estuvo con su Hijo al pie de la cruz (Jn.19, 25), y así se ve plasmado estos días en nuestra parroquia al celebrar el triduo en honor del Santísimo Cristo de la Pobreza. Lo que podemos contemplar estos días en el altar mayor del templo parroquial es la más pura expresión plástica de lo que San Juan recoge en su Evangelio, invitándonos a la contemplación y a la reflexión, a pararnos un momento y observar hasta que punto Dios es generoso con nosotros, y como María se nos presenta como modelo de bondad y entrega sin condiciones.

 

   Como deciamos al principio, el sufrimiento de María junto a su Hijo no pasa inadvertido para los primeros cristianos. Así algunos Padres de la Iglesia como San Agustín o San Bernardo cantan los dolores y sufrimientos de la Virgen María en sus escritos, componiendo hermosas oraciones y cánticos. Igualmente, el Papa Sixto III, en el siglo V, al restaurar la basílica liberiana, denominada de Santa María la Mayor, en Roma, la consagra a la memoria de los mártires y de su Reina.

  

   Ya en la Edad Media la devoción a los Dolores de María aparece muy arraigada en los fieles gracias a la labor de difusión llevada a cabo por la Orden Servita de San Felipe Benicio en el siglo XIII, que popularizó el hábito y el escapulario de la Dolorosa en toda Europa. Este es uno de los motivos por el cual la insignia de nuestra Cofradía no es una medalla si no un escapulario, manteniendo así la tradición servita.

 

   En el siglo XVII, en plena ebullición de la contrarreforma de Trento, comienzan a celebrarse en la Iglesia dos fiestas litúrgicas en torno a los Siete Dolores de la Virgen María. En primer lugar el viernes después del Domingo de Pasión, conocida como Viernes de Dolores, y otra el tercer domingo de Septiembre. La primera fue extendida a toda la Iglesia por el Papa Benedicto XIII en 1.724 y la segunda por el Papa Pío VII en 1.814, en memoría por el cautiverio sufrido por el pontífice bajo el dominio de Napoleón. Esta fiesta se fijó definitivamente el 15 de Septiembre y es la única que aún se celebra litúrgicamente.

 

   Frecuentemente aparece en los textos bíblicos la referencia al número siete para referirse simbólicamente a la universalidad, por lo que podemos interpretar que la conmemoración de los Siete Dolores de la Virgen son escenas que nos recrean las principales estapas de la vida terrena de María.

Estos Siete Dolores se representan tomando las palabras del anciano Simeón (Lc. 2-35), siendo en sí mismo este hecho uno de los Siete Dolores:

 

1.- Profecía del anciano Simeón.

2.- Huída a Egipto.

3.- El Niño Dios perdido en el Templo.

4.- María se encuentra con Jesús camino del Calvario.

5.- Jesús muere en la cruz.

6.- Jesús es descendido de la cruz.

7.- Sepultura de Jesús.

 

   Esperemos que desde la contemplación de estos Siete Dolores podamos apreciar en María, en su abvocación de Nuestra Señora la Virgen de los Dolores, un modelo de entrega generosa, pero también un modelo de superación ante estos momentos difíciles de cruel crisis y pérdida de valores.

SALUDA DE LA JUNTA DE GOBIERNO

Queridos hermanos y hermanas cofrades, un año más nos disponemos a vivir con fe en Dios y bajo la atenta mirada de su Madre, la Virgen de los Dolores, nuestra Semana Mayor.

 Con la del Miércoles de Ceniza arrancan las distintas celebraciones de la Cuaresma y de la Pascua, tiempo de reflexión y preparación, que desde nuestra Cofradía pretendemos que sea también un tiempo de confraternización y trabajo conjunto.

Trabajo que también se hace en unión con el resto de Hermandades y Cofradías que participan en los Misterios de la Semana Santa en nuestra ciudad y que tiene su reflejo en la Junta de Hermandades y Cofradías. Este año para todos nosotros va tener una gran carga emocional en el recuerdo del que fuera Presidente de la Junta de Hermandades, D. Manuel Sánchez Gálvez, y que el pasado mes de Septiembre falleció dejando el legado de una intensa labor y entrega a la Semana Santa de Villanueva de la Serena. Queremos desde nuestra Cofradía unirnos al pesar de sus familiares y amigos, pero también estar con ellos en la esperanza de que Manolo ha logrado vivir plenamente la Pascua y se encuentra gozando ya de la presencia de Dios y acompaña a nuestra Madre común en el misterio de su soledad.

Que el recuerdo de Manolo nos haga vivir este año nuestras celebraciones de una manera intensa y verdadera, y nos anime a seguir caminando conjuntamente en el engrandecimiento de nuestra Semana Santa.